11 jugadores más importantes de la franja chimbotana !!!

El 'Papi' Ostolaza hizo casi toda su vida en José Gálvez. Nació el 11 de septiembre de 1940 en el distrito de Santa, provincia de Santa, en Áncash. Con 18 años de edad, tanto él como su hermano 'Tato' (Guillermo Ostolaza) jugaban por el Deportivo San Juan en la Liga Distrital de Chimbote, hasta que el 'Chino' Manuel Rivera Sánchez vio sus condiciones y los incorporó al club del mismo nombre (club Manuel Rivera, que luego sería evidentemente José Gálvez). Desde su llegada en 1959, siempre se mantuvo en Gálvez, exceptuando un par de años en los sesenta, cuando la Liga de Chimbote sufrió la desafiliación; en esas temporadas, los Ostolaza pasaron al Atlético Trujillano de Trujillo. El recio zaguero de mil batallas fue uno de los artífices del ascenso del cuadro chimbotano a la Primera División en 1971. Se retiró al año siguiente; sin embargo, regresó en 1974 para el merecido partido de despedida ante el clásico Siderperú. Qué duda cabe, se trata del jugador más representativo en toda la historia de la franja chimbotana; por algo arrasó en la encuesta, en la que dos de cada tres votantes lo consignaron como uno de los mejores galvistas de la historia.

 

Nació el 22 de enero de 1982 en San Nicolás de los Arroyos, Argentina. Tras formar parte de las divisiones menores del club Belgrano de San Nicolás de los Arroyos, fue a los 15 años cuando desde el Club Atlético River Plate le llegó la propuesta de sumarse a sus divisiones inferiores. En 2003 llegó a Rosario Central, firmó su primer contrato profesional y fue parte del equipo profesional por los siguientes dos años. En 2005 llegó al Club Atlético Candelaria, participó del Torneo Argentino A y llegó hasta los play-offs. En 2006 comenzó su carrera en Coquimbo Unido, donde en su primera temporada fue elegido el mejor jugador del año entre hinchada y diarios deportivos. Por su buen rendimiento renovó su contrato por dos años más. Salió campeón del Torneo Clausura de la Segunda División de Chile en 2008, siendo capitán de su equipo. En 2009, con un palmarés amplio, llegó a José Gálvez y rápidamente demostró sus condiciones -fue determinante en el resultado de varios partidos-, lo que fue vital para convertirse en ídolo. Al año siguiente, con la cinta de capitán, fue considerado el mejor arquero del Descentralizado 2010. En 2011 fichó por la Universidad César Vallejo; sin embargo, una lesión lo alejó de casi toda la temporada.

Aún como amateur se hizo jugador de José Gálvez en 1969, tras haberse puesto previamente los uniformes del Deportivo Chimbote (1965 y 1966) y Deportivo Sogesa (entre 1967 y 1968) en las etapas distritales de Copa Perú. Con las características de un delantero feroz e imparable, en 1970 logró el ascenso con el cuadro de la franja, experimentando su primera participación en la máxima categoría con Gálvez en 1971. Posteriormente, pasó sin mucho aspaviento por Unión Tumán y Juan Aurich, aunque recobró notoriedad en 1975 cuando ingresó a las filas de Unión Huaral -donde ya militaba el 'Papi' Estrada, y dirigido por Moisés Barack-. Tras permanecer tres temporadas en buen nivel, Universitario lo convocó para tenerlo en el cuadro y lo gozó por dos años (1978 y 1979). En 1980 pasó al fútbol chileno para militar en el Deportes Green Cross y, luego, para formar parte del O'Higgins. Al finalizar su periplo en el país del sur, volvió a Unión Huaral, y luego de breves pasos en San Agustín y León de Huánuco, finalizó su etapa como futbolista nuevamente en el cuadro huaralino, hasta confirmar su retiro en 1986. Vale aclarar que en un principio fue apodado 'Cassaretto', dada la relevancia de Enrique 'Loco' Cassaretto por aquel entonces; sin embargo, a mediados de los setenta, Alfonso 'Pocho' Rospigliosi le puso al apelativo de 'Torito', con el cual mucha gente lo identificó.

Ante la necesidad de darle más continuidad, en 1972, Alianza Lima cedió al mediocampista canterano César Cueto al José Gálvez en calidad de préstamo. Por aquel entonces, Cueto contaba con solo 20 velitas apagadas. Es así que, dicho año, el equipo de la 'Franja Roja' realizó su mejor campaña de toda su historia deportiva, llegando a disputar la liguilla final para la clasificación de los equipos a la Copa Libertadores. El 'Loro' había demostrado que estaba para grandes cosas y, en 1974, firmó por Deportivo Municipal, teniendo un año muy irregular debido a los problemas económicos del club. No obstante, en 1975 fue el despegue definitivo del 'Poeta de la Zurda', no solo por ser el conductor aliancista por excelencia, sino porque además ganó el campeonato y fue convocado a la selección peruana. La calidad junto a los títulos del Descentralizado 1975, 1977 y 1978 fueron suficiente -y quizás demasiado- currículo para emigrar a Colombia, donde su legado y éxitos no se detendrían, logrando ganar el campeonato colombiano en dos ocasiones: Atlético Nacional y América de Cali en 1981 y 1984, respectivamente. Su retorno (1987) y retiro (1991) se concentrarían en Alianza Lima.

 

Sencillamente conocido como el 'Papi', además de convertirse en referente de la entidad galvista, pasó por equipos como el José Balta, Deportivo Sogesa y Unión Huaral; de hecho, con el último mencionado disputó la Copa Libertadores en los años 1974 y 1976. A mediados de los setenta, fue seleccionado nacional y estuvo en la nómina campeona de la Copa América 1975. Dentro de sus apariciones en la entidad chimbotana, al 'Papi' se le recuerda como el autor del primer y único gol ante Alianza Lima el 25 de julio de 1971, en lo que significó la primera victoria de José Gálvez en Primera División, torneo en el que llevaba seis derrotas y dos empates, cumplida la novena fecha. Según cuenta el mismo Estrada en una anécdota con el cuadro chimbotano, "El momento más triste que viví fue cuando faltando 15 minutos y estando en la lista de titulares, llegó Cueto, me quitaron la camiseta y ni siquiera me consideraron como suplente. Sólo me quedó irme a mi casa y allí lloré con mi familia, pero el martes, como si no hubiese pasado nada, y como casi siempre primerito para los entrenamientos...".

 

Ángelo Daniel Cruzado Sifuentes, chimbotano nacido el 10 de diciembre de 1979, es un delantero veloz, de buen pie, aunque con un promedio de goles no tan favorable. Comenzó a jugar al fútbol un poco tarde. En el año 2002 apareció en el Unión Florida, donde se quedó dos temporadas y, en 2004, actuó en Unión Juventud -ambos de la Liga Distrital de Chimbote-. Al año siguiente pasó a las filas del José Gálvez, elenco con el que se coronó campeón de la Copa Perú en la temporada 2005, con lo que arrancaría su participación en el fútbol profesional. Marcó tres tantos en la máxima categoría con el equipo de la franja. En el 2007 pasó a las filas del Sport Boys, permaneciendo solamente aquella temporada. Retornó al Gálvez en el 2008, hasta el 2010, cuando le tocó afrontar el descenso. En la actualidad milita en Inti Gas, clasificado a la Copa Sudamericana; igual, no deja de ser un ídolo en la franja galvista.

 

Formado en la Academia Francisco Ríos, debutó en el Cultural Casma en 2008, año en el que consiguió el pentacampeonato distrital del club; sin embargo, la suerte una vez más le fue esquiva y no pudo superar la Etapa Departamental de Áncash. En 2009, fue transferido a Gálvez, cuando era considerado una de los mejores proyectos a futuro del fútbol chimbotano y debutó el 25 de abril. Aquella vez, el cuadro de la franja recibió a Alianza Atlético por la fecha 10 y Rafael Castillo le dio la oportunidad de ser titular. Permanece en el plantel galvista hasta la actualidad, tras haber afrontado el descenso y disfrutado este último ascenso. Con el club consiguió el primer título del Torneo Intermedio en 2011. Fue el goleador de su equipo al anotar un hat-trick en la final ante el Sport Áncash. El volante ofensivo -a veces lateral- dejó de ser promesa para convertirse en una realidad.

 

El 'Chato' con su velocidad inquietó en el ascenso. Habituado en la volante de creación y con la cinta de capitán fue clave para adquirir un lugar en la Primera División 2006, convirtiéndose en un referente para los chimbotanos de aquel entonces, que lo veían como un ejemplo dentro y fuera de las canchas. Fuera de su paso por César Vallejo, su prontuario deportivo lo involucra con exclusividad a las etapas de ascenso, puesto que años después permaneció disputando la Copa Perú desde esas instancias: Atlético Municipal Mariátegui de Villa María y Siderperú, entre otros. Paralelamente a la actividad futbolística, Soto Campos estudió administración de empresas, y en la actualidad es el Administrador del Centro de Alto Rendimiento en Chimbote.

 

Chapas no le faltaron: 'Vasito' y 'Botellita', entre otros. El ex puntero izquierdo nacido en Casma, esmirriado por contextura, fue uno de los mejores prospectos provincianos de los noventa e hijo ilustre de Chimbote, aunque su bohemia vida fue el peor karma que pudo tener, perdiendo la posibilidad de fichar por Sporting Cristal -con Amaral al mando- o ganarse una convocatoria de Vladimir Popovic. Era un virtuoso, técnicamente hablando. Cruz nunca pudo escapar de su crianza amateur, la que nació en el Unión Juventud de Casma, luego, en el Libertad de Trujillo y el Cultural Casma, para cerrar en el Ovación Sipesa. Ya cuando subió a Primera División y compitió en la Conmebol de 1993, seguía siendo un jugador amateur en la profesional. Volvió a disputar el ascenso, logrando el título de la Copa Perú 1996 con el cuadro de la franja. Jugó 17 partidos con Gálvez en Primera en 1997, y posteriormente cerró su carrera en 2000 con Deportivo Wanka -antes militó en Deportivo Pesquero-. En la actualidad funge de técnico en Casma.

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Padre de Marco, Giuliano y Luis, es el goleador histórico de José Gálvez (24 anotaciones) en su paso por Primera División. Lleva registrado 23 goles, cifra que cosechó en las temporadas 1971, 1972 y 1973. Tras formar parte del ADO (el cuadro amarillo jugó en el Descentralizado 1971 y, luego de ubicarse en el puesto 14, descendió para no volver), ancló en José Gálvez, ganándose el respeto y la admiración en los años que el cuadro chimbotano se mantuvo instalado en la máxima división. Posteriormente se los recordaría en su paso por CNI.

El rosarino debutó en la máxima división argentina el 26 de marzo de 2006, en el encuentro que Rosario Central venció por 3-0 a Tiro Federal. En Central jugó 11 partidos entre el 2006 y el 2007. En el 2008, el elenco canalla lo cedió a préstamo al José Gálvez, que regresaba al Descentralizado. A punta de goles se convirtió en referente, encumbrado como uno de los destacados de aquel año y sumando 20 goles en la temporada, igualando en la tabla de goleo con Sergio Ibarra, aunque ampliamente superado por Miguel Ximénez. Al año siguiente fue prestado nuevamente, esta vez a Alianza Lima, equipo en el que jugó durante todo el Descentralizado 2009 y con el que anotó 10 goles. En la temporada siguiente marcó en cuatro ocasiones hasta que tuvo que dejar la institución blanquiazul a fines de agosto de 2010 para retornar a Rosario Central. En diciembre de ese mismo año se desligó del equipo canalla, para fichar por Cobresol. No obstante, pese al correr de los años, su recuerdo en tienda chimbotana es imborrable.