Era una medida que se veía venir. El plantel de jugadores del José Gálvez FBC se declaró en huelga indefinida hasta que la directiva galvista no le cancele sus pagos del mes de marzo, y raíz de esto no entrenarán mientras no haya una solución a su reclamo.
Era de esperarse este plantón por parte de los jugadores porteños, pues los directivos del club prometieron pagarles los sueldos atrasados el martes de esta semana. Sin embargo, ese día ningún directivo se hizo presente, haciendo que lo jugadores se sientan burlados. Es por ello que anteayer no entrenaron en el Manuel Rivera Sánchez- por la tarde- y esperaron a que sus contratantes den la cara ayer en los entrenamientos que esta institución deportiva debió realizar en el estadio Municipal de Coishco.
Hasta ahí solamente llegó a quien denominaron -pero no lo es- presidente interino del club, Norman Luna Abanto, quien les explicó de la difícil situación económica por la que atraviesa la institución. También estuvo presente el entrenador Julio César Uribe.
En el centro del campo, tanto los jugadores (quienes estaban cambiados y listos para entrenar), como el comando técnico y Norman Luna empezaron a dialogar para intentar llegar a un acuerdo. La decisión de efectuar un plantón y de no continuar con las prácticas diarias fue rotunda por parte de los jugadores, ya que Norman Luna manifestó que no había dinero en la arcas del Gálvez para pagarles lo que se les debía y que no tenían una fecha exacta de cuando se les podría abonar sus pagos.
El portero Daniel Ferreyra tomó la palabra por parte de los jugadores. Sus gestos y movimientos con las manos revelaban todo lo que sus compañeros sentían y querían dar a conocer a la dirigencia. Hablaron por un espacio de 30 minutos aproximadamente. El `´Diamante´ también hizo uso de la palabra así como Mario Leguizamón.
Los jugadores, al no hallar una clara solución a sus exigencias, optaron por no entrenar mientras no se les pague y abandonaron el reciento deportivo en grupo, dejando al comando técnico y a Norman Luna dentro del campo. Cuando salieron nadie quiso declarar a la prensa.
Las expresiones de descontento lo reflejaban en sus rostros. ¿Qué pasó? “Tú lo has visto”, decían algunos. “Hemos decidido no declarar hasta que se soluciones esto, es un acuerdo entre todos”, decían otros jugadores quienes se marcharon en sus respectivas movilidades. El malestar e incomodidad por las promesas incumplidas era evidente.
Abordamos al entrenador galvista, Julio César Uribe, y gesticulando con la cabeza decía que no podía hablar. Norma Luna Abanto, a su salida, tampoco quiso entrar en detalles. “Hay una diferencia entre ambas partes, pero después conversamos”, dijo el directivo. Sin duda, el panorama actual en el `equipo del pueblo´ es muy incierto, y no es un bueno para que el conjunto afronte- si es que deciden jugar- su respectivo partido ante el Sporting Cristal este domingo a las 4 de la tarde en el estadio Centenario.
¿SOLUCIÓN A LA VISTA?
El pro Tesorero de la institución galvista, Fernando Guzmán García, dijo que el plantel de jugadores ha sido citado a entrenar hoy en el estadio Manuel Rivera Sánchez a las 9 de la mañana. En el primer recinto deportivo de Chimbote, se realizará otra reunión con los jugadores para ofrecerles un porcentaje equivalente a sus salarios, y de esta manera dar una solución al reclamo de los futbolistas. “Ahí se les va a dar una fecha y un porcentaje con el cual se pueda cumplir (con sus sueldos.) Yo creo que mañana ya se debe de estar solucionando, la situación económica es difícil, pero no es fácil encontrar el dinero de la noche a la mañana, mucho más cuando estamos ´ajustados´ por haber terminado de pagar los 90 mil dólares de los Agremiados. Por esa razón hemos tenido que retrazar la planilla (de los jugadores)”, dijo Guzmán García
Fuente: Diario De Chimbote
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